miércoles, 25 de febrero de 2015

Prólogo


La noticia de nuestra inminente mudanza me había sorprendido, pero más me sorprendió ver lo que hacían los pilotos de cross. En la zona de las gradas donde estábamos se podía ver todo, e incluso oler el humo del tubo de escape de las motos.

Tiago y mi madre hablaban discretamente de mi reacción a mi lado. Yo sinceramente me lo esperaba, aunque no tan pronto. A decir verdad, se veían muy enamorados.

Una moto arrancó desde una recta. Cuesta tras cuesta fue haciendo diferentes acrobacias dejándome impresionada. El chico del mono negro y azul aceleró a más no poder en una cuesta bastante inclinada. Al llegar arriba, la moto dio la vuelta en el aire, al tiempo que el piloto soltaba el manillar.  Con el aire atascado en mis pulmones vi como la moto volvía a su posición original con el chico totalmente ileso.

No me lo podía creer. ¿Cómo había gente dispuesta a arriesgar la vida de ese modo? Una sensación extraña me recorrió el cuerpo mientras me comía con los ojos al chico, que seguía recorriendo el circuito. Una vez terminó, la gente estalló en aplausos. Yo apenas podía mover mis manos, estaba demasiado impresionada.

De repente Tiago e Isabel se pusieron de pie instándome a ir con ellos. A pesar de ir caminando no podía apartar la vista del chico con el mono azul y negro.

Vamos, ahí está Damián, dijo Tiago.

Por segunda vez en menos de diez minutos me quede sin aire, no podía ser. ¿El chico era el hijo de Tiago?
Llegamos abajo junto a él mientras se quitaba el casco. Dos farolas color miel me miraron sin vergüenza. La realidad me golpeo, yo iba a vivir con él, yo iba a tener un hermanastro.

Hola, soy Damián.


Su boca se torció en una picara sonrisa hacia mí. Estaba perdida… Algo en mi interior me decía que esto no iba a acabar bien.



Hola¡¡ en breve subiré el primer capitulo¡, espero que os haya gustado este pequeño adelanto ;) Bss (L) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario